El suroeste de la Península Ibérica, que constituye el marco geográfico del proyecto, fue en la Protohistoria y la Antigüedad un área conocida internacionalmente por su capacidad de producir y comercializar alimentos envasados en ánforas, estando toda la región íntimamente relacionada con las principales rutas marítimas de época fenicio-púnica y romana. La feracidad de sus campos, la abundancia de sal y salinas, y la abundante pesca disponible hicieron que en este extremo occidental del Mediterráneo (en términos culturales) la fabricación de derivados agropecuarios y piscícolas fuese uno de los negocios más prósperos y generalizados de todas las culturas asentadas en la región, dando lugar a que la producción de contenedores cerámicos destinados a su transporte alcanzase igualmente un desarrollo muy notable en términos técnicos y cuantitativos.

El principal objetivo del proyecto es lograr una mejoría sustancial en la comprensión de los procesos de producción y comercialización de ánforas desarrollados durante el periodo protohistórico en el suroeste de la Península Ibérica, tomando como casos de estudio centrales la Bahía de Cádiz y el Bajo Guadalquivir. Se pretende que el estudio de estas dos áreas, claves en la economía regional del I milenio a.C., que pueda servir de primera referencia extensible en el futuro a otros espacios geográficos y momentos cronológicos. El análisis planteado en el proyecto fija su atención particularmente sobre los talleres alfareros, sus manifestaciones arquitectónicas (hornos y otras estructuras) y sus componentes muebles esenciales (tornos, herramientas, ánforas, etc.). A partir de los datos ya disponibles, conjugándolos con la aportación de la etnoarqueología y del criterio experto de artesanos actuales, se pretende reproducir a escala real de forma fidedigna no sólo las infraestructuras, sino realizar réplicas de herramientas y envases de modo que sean funcionales y permitan mensurar y valorar aspectos hasta el momento inéditos de los procesos tecnológicos y de la chaine operatoire (cadena operativa) de estos establecimientos artesanales.

Se pretende así lograr desvelar importantes indicadores para la lectura histórica de la economía de la época, ayudando a reinterpretar datos arqueológicos que hasta el momento han sido abordados con escasas garantías dadas las limitaciones de método existentes y la parquedad del propio registro arqueológico. El proyecto trata así de lograr un significativo salto de calidad en la investigación de una línea esencial para la interpretación de la historia regional, logrando un modelo interpretativo y metodológico que sea posteriormente aplicable a otras áreas y periodos, e incluso a otras actividades de carácter artesanal y circuitos comerciales.

En relación con esto, además de ilustrar aspectos técnicos ignorados por las fuentes y casi imposibles de determinar por los estudios arqueológicos estándar, se pretende lograr una visión cuantitativa más ajustada de los tiempos y las capacidades de producción y comercialización, y de cómo interaccionaron la producción de ánforas y la construcción de buques mercantes en época prerromana en la zona meridional de la Península Ibérica considerando el registro arqueológico disponible. Teniendo en cuenta que las comunidades humanas asentadas en la región en esta época tuvieron en estas actividades algunos de sus pilares económicos, es fácil imaginar que se trata de una temática con un alta capacidad de impacto científico y que es además esencial para el examen de otras facetas (demográficas, explotación del medio y los recursos naturales, contaminación y efectos antrópicos en el medio ambiente en la Protohistoria, etc.) no menos importantes.

De forma más específica, el desarrollo del proyecto incluirá la ejecución de determinadas actividades y el cumplimiento de determinados objetivos más concretos:

– Caracterizar los métodos de construcción y la organización de los talleres alfareros fenicio-púnicos y turdetanos del suroeste peninsular.

– Paliar los enormes vacíos de información sobre los procesos de fabricación de las cerámicas, especialmente las ánforas (desde el torneado hasta la colocación dentro del horno), y también las lagunas relativas a la preparación, uso y mantenimiento de hornos cerámicos protohistóricos, a partir de la relación de experimentos de torneado de envases y cocciones experimentales monitorizadas.

– Desarrollar experimentos paralelos en formato digital que permitan contrastar los datos obtenidos físicamente, tanto cuantitativa como cualitativamente, refinando ambas herramientas para generar un modelo metodológico.

– Revisar la debatida relación entre los cambios operados a lo largo del I milenio a.C. en la morfología de los barcos de carga de diseño mediterráneo (púnicos en particular) y la evolución paralela de las formas de las ánforas, y evaluar a partir de los experimentos digitales los ritmos y características de este proceso de adecuación mutua, clave para comprender la evolución del comercio antiguo.

– Examinar las relaciones territoriales establecidas entre los alfares y las áreas relacionadas con la comercialización marítima y terrestre de las ánforas (viario, puertos, fondeaderos, almacenes portuarios, etc.), así como las conexiones con las áreas de captación de materias primas y la gestión de los recursos en relación al medio (geomorfología, análisis de redes, etc.).


La experimentación material programa incluye la construcción de un horno cerámico, réplica de modelos protohistóricos ampliamente conocidos en la Bahía de Cádiz de los siglos VI-V a.C., usando técnicas y modelos similares a los empleados en la época, registrando meticulosamente todos los parámetros de inversión de recursos materiales y humanos. Asimismo, se ha previsto la realización de cocciones experimentales monitorizadas que permitan ensayar aspectos como los procesos de carga y descarga, de alimentación, de reparación, etc., y también medir sus tiempos, el porcentaje de cerámicas a descartar en cada cocción, la ratio de cocciones al mes, etc.), lo que implicará también la producción de réplicas de ánforas y otras cerámicas, así como de tornos alfareros y otros instrumentos de ceramista. La producción de réplicas de ánforas, con la asistencia de maestros alfareros tradicionales, permitirá además ensayar aspectos escasamente conocidos hasta el momento como la decantación de las arcillas y caracterizar las “recetas” de pastas antiguas, o también la impermeabilización interior con cera y/o resina (empegado), para lo cual se hará uso de la abundante información arqueométrica publicada en las dos últimas décadas.

En paralelo, se ha previsto realizar un esfuerzo experimental análogo utilizando herramientas digitales específicas (software de modelado 3D, fotogrametría, MDT y Sistemas de Información Geográfica, etc.) que permitan comparar los resultados teóricos obtenidos a través de esta vía con los de la Arqueología Experimental material, refinando la herramienta virtual para poder ser aplicada a yacimientos de esta y otras etapas históricas o entornos geográficos diversos. Esta metodología digital se utilizará además para estudiar aspectos que escapan a las posibilidades de la experimentación a escala real, como la fabricación de contenidos (a través del estudio de centros de producción de conservas de pescado, vino o aceite excavados en la zona) y sobre todo la relación establecida entre la forma de las ánforas y la tipología de los barcos de transporte de época prerromana. Los modelos digitales permitirán realizar una primera aproximación a los métodos y tiempos de carga y descarga, o el encaje de la morfología de las bodegas con la silueta de los envases cerámicos. Se trata así de arrojar luz sobre aspectos fundamentales de la economía de las sociedades del suroeste peninsular del I milenio a.C. que por el momento conocemos deficientemente, imposibilitando una interpretación histórica precisa.